Cómo hacer esquejes

Reproduce tus plantas naturales

Una forma de expandir tus plantas y multiplicarlas es cortar un pequeño trozo (del tallo) y replantarlo en un macetero nuevo. Esta técnica es bastante sencilla, pero se debe hacer en unas condiciones concretas para que sea efectiva. Lo recomendable es hacerlo durante las épocas de temperaturas suaves y humedad moderada, es decir, primavera y otoño.

Para ‘clonar’ nuestras plantas solo necesitas: tijeras y un bote. Corta un trozo de tallo más o menos generoso con varios nodos (la zona abultada desde donde nacen las hojas) y colócalo en un bote pequeño. Es recomendable que tan solo dejes las hojas del extremo superior de la planta para que toda la fuerza se concentre en la parte inferior y eche raíz rápidamente. Echa un poco de agua y coloca el tallo. Cambia diariamente el agua durante la primera semana y ¡listo!

También puedes optar por añadir un poco de tierra y sustrato de cultivo.

Crea las condiciones favorables para que crezcan

Una de las cosas más importantes para trasplantar plantas es no hacerlo en una maceta mucho más grande que la propia planta, sino de las mismas dimensiones aproximadamente. Al retirar la planta de su antigua maceta, coge un poco de esa misma tierra. En un macetero aparte mezcla esa tierra con un poco de grava y coloca la planta. Si quieres, puedes poner un poco de sustrato de cultivo para mejorar el drenaje.

Divide y multiplica

Otra de las formas de ‘clonar’ tus plantas es dividirlas. ¿Cómo se hace? Muy sencillo. Literalmente consiste en partir la raíz por la mitad y colocar cada parte en un macetero individual. Añade algo más de tierra, pero sin que quede demasiado compacta para no taponarla.